El venezolano Antonini Wilson incurrió en numerosas contradicciones, en especial con la declaración que realizó en su momento por el caso de la valija en sede judicial argentina la agente de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA), María del Luján Telpuk, en el relato que hizo en la carta que supuestamente le envió a Hugo Chávez.
En primer lugar, Antonini sostuvo en esa carta, que lleva su firma, que "todo lo que hice fue ayudar a cargar las maletas a los carros en un gesto de caballerosidad para con la asistente Victoria B.", cuando en sede judicial argentina los testigos afirmaron que cuando la agente de la PSA preguntó "de quién" era la maleta que le resultó sospechosa después de haberla pasado por el escáner, Antonini se hizo cargo de la misma.
El venezolano también le aseguró a Chávez que "yo no tenía idea de que el avión llevaba dinero" y que se enteró del mismo "cuando el inspector de Aduana en Argentina abrió la maleta", aunque Telpuk declaró en su primera intervención como testigo que cuando se presentó ante ella, antes de la apertura, dijo primero que eran "libros", luego "unos papelitos" y, por último, admitió que había "60 mil dólares".
Además, Antonini relató que "la maleta grande pasó y se la llevó Uberti", cuando unos párrafos antes había señalado que era en esa valija donde "creo" que iba más dinero que el que se encontró.
Por último, el venezolano señaló que "cuando pasaron varias horas, me dijeron que si yo decía que el dinero era mío, sólo sería una infracción aduanera y que se quedarían con la mitad del dinero por dicha infracción", aunque las autoridades de la Aduana indican que el Acta se firmó apenas se contó el dinero y que en ella Antonini Wilson reconoció con su firma que el dinero era de su propiedad.
El empresario venezolano insistió en que los U$S 800.000 que le incautó la Aduana eran para la campaña presidencial de Cristina Kirchner. Desde hace tiempo que la imagen de la actual presidenta viene decayendo, casi nada queda de aquellos índices de popularidad en el 2007 que la dieron como ganadora en las elecciones pasadas.
Así lo reprodujeron medios argentinos que cubren el juicio que se sigue en Miami, e indicaron que el “valijero” sostuvo que, tras su paso por la oficina de Uberti, se tomó algunos días de vacaciones en Bariloche.En su segundo día de audiencia en la Corte Federal de Miami, Antonini Wilson exhibió un documento que le entregó el abogado Franklin Durán -único acusado en el proceso que se sigue en los EEUU-, en el que ponía atención sobre los puntos claves del escándalo que involucra a los gobiernos de Argentina y Venezuela.
En primer lugar, Antonini sostuvo en esa carta, que lleva su firma, que "todo lo que hice fue ayudar a cargar las maletas a los carros en un gesto de caballerosidad para con la asistente Victoria B.", cuando en sede judicial argentina los testigos afirmaron que cuando la agente de la PSA preguntó "de quién" era la maleta que le resultó sospechosa después de haberla pasado por el escáner, Antonini se hizo cargo de la misma.
El venezolano también le aseguró a Chávez que "yo no tenía idea de que el avión llevaba dinero" y que se enteró del mismo "cuando el inspector de Aduana en Argentina abrió la maleta", aunque Telpuk declaró en su primera intervención como testigo que cuando se presentó ante ella, antes de la apertura, dijo primero que eran "libros", luego "unos papelitos" y, por último, admitió que había "60 mil dólares".
Además, Antonini relató que "la maleta grande pasó y se la llevó Uberti", cuando unos párrafos antes había señalado que era en esa valija donde "creo" que iba más dinero que el que se encontró.
Por último, el venezolano señaló que "cuando pasaron varias horas, me dijeron que si yo decía que el dinero era mío, sólo sería una infracción aduanera y que se quedarían con la mitad del dinero por dicha infracción", aunque las autoridades de la Aduana indican que el Acta se firmó apenas se contó el dinero y que en ella Antonini Wilson reconoció con su firma que el dinero era de su propiedad.
El empresario venezolano insistió en que los U$S 800.000 que le incautó la Aduana eran para la campaña presidencial de Cristina Kirchner. Desde hace tiempo que la imagen de la actual presidenta viene decayendo, casi nada queda de aquellos índices de popularidad en el 2007 que la dieron como ganadora en las elecciones pasadas.
Así lo reprodujeron medios argentinos que cubren el juicio que se sigue en Miami, e indicaron que el “valijero” sostuvo que, tras su paso por la oficina de Uberti, se tomó algunos días de vacaciones en Bariloche.En su segundo día de audiencia en la Corte Federal de Miami, Antonini Wilson exhibió un documento que le entregó el abogado Franklin Durán -único acusado en el proceso que se sigue en los EEUU-, en el que ponía atención sobre los puntos claves del escándalo que involucra a los gobiernos de Argentina y Venezuela.